Nace un Rey

PDF

Ya cae la noche tranquila,
la noche que te vio nacer.
Y mi alma se aquieta y espera,
vivir un momento de paz.

De nuevo he cerrado mis ojos,
queriendo tu rostro encontrar.
Buscando un pesebre en Belén,
buscando sentir tu calor.

De ti es de quien se habla de un rey,
de un reino que no tiene fin.
Y tan pobre que naces, Jesús,
yo tampoco te he dado un lugar.

Mil veces te pido perdón,
me acerco y me postro ante ti.
Y mi alma, un pobre pesebre,
hoy se abre y te acoge feliz.

En ti se ha gestado el milagro,
que llena la noche de luz.
Que hace de un frío pesebre,
la cuna más bella que hay.